Considerado hasta ahora como obra anónima, se trata, en realidad, del boceto preparatorio para una de las pechinas de la iglesia del Grao de Valencia, pintada por Vicente López en torno a 1800, lo que explica el perfil triangular en que se inscribe la figura. [...] Tras ser incendiado el templo durante la guerra civil, las pinturas quedaron gravemente dañadas, siendo precisamente ésta una de las pechinas mejor conservadas, mostrando con el presente boceto interesantes variantes de composición. Así, en este estudio preparatorio aparece aislada la figura de la profetisa y en posición diferente, siendo sustituidas luego las espumas del mar por otras mujeres tañendo instrumentos. En fecha muy reciente, ha aparecido en una colección vasca el boceto definitivo para esta misma composición, rigurosamente inédito , lo que también pudiera indicar que esta variante fuera pintada por López quizá para otro templo valenciano con la misma decoración en sus pechinas.