El estilo y la técnica con que se ha realizado esta figura son buenos, presentando algo de movimiento en los ropajes que contrasta con la frontalidad de la figura. La parte posterior está menos trabajada. Se trata de obra realizada en el norte de Italia, a fines del siglo XVII, del que no se han encontrado réplicas ni variantes. Puede derivar de los modelos creados por Donatello para Or san Michelle de Florencia, aunque también recuerda a la fugura del Padre Eterno de Girolamo Campagna, en San Giorgio Maggiore de Venecia. Probablemente formaría parte de un conjunto con los cuatro evangelistas.