Juan de Juni fue un escultor franco-español. Junto con Alonso Berruguete, Juni formó la gran escuela de la escultura castellana, con una gran y extensa obra realizada mayormente en los más de treinta años que permaneció en Valladolid. Eso le ha valido su presencia destacada en el Museo Nacional de Escultura, especialmente, y en el Museo Diocesano y Catedralicio de Valladolid, entre otros lugares de la ciudad. Presentó un gran dominio en los materiales escultóricos como el barro cocido, la piedra y la madera y un perfecto conocimiento de la anatomía humana. Su oficio fue el de escultor, también denominado como ""maestro de hacer imágenes"" o como entallador que por misión tenía el hacer los elementos decorativos de fachadas, portadas o retablos, así también se dedicó a la construcción y al montaje de la arquitectura de los retablos a quienes se les llamaba ensamblador y como prueba de su oficio de arquitectura se sabe que realizó en el año 1565, en Valladolid, el Arco para recibir a la reina Isabel de Valois, conservándose aún el diseño de dicha obra.